Como todo artista, Marco Antonio tiene sus exigencias a la hora de actuar, aunque en el listado se percibe su humildad, en comparación a otros cantantes que hacen sus pedidos extravagantes.

Crónica pudo acceder a los pecheos que Solís pidió a la organización del show en Paraguay y que incluyen cuatro camerinos; uno privado para él, sin aire acondicionado, pero con ventilador.

Pidió una lámpara de luz indirecta, una mesa con mantel, un espejo grande, una sala de dos o tres piezas, cuatro sillas extras, servicio de café y té, cafetera, vasos, cucharas, azúcar y agua caliente.

Para que la garganta no le falle a la hora de cantar debe tener cerca doce limones, sin cortar, y dos envases de miel de abeja pura.

También cuatro copas para agua, seis botellas de agua mineral natural, 24 gaseosas de distintos sabores, ocho energizantes, una bandeja con surtido de carne fría, jamón y queso.

Además, para él y sus músicos debe haber una bandeja de frutas variadas, enteras, sin cortar; y una botella de vino tinto.

No deben quedar ausentes una caja de servilletas desechables, cuatro toallas blancas faciales, y seis velas: dos rojas, dos blancas y dos azules.

El concierto de Marco Antonio será el sábado 22 de octubre en la Nueva Olla y se prevé la actuación de Los Rancheros, desde Argentina, celebrando sus 30 años de buena música. La velada se iniciará con el grupo nacional Los Ojeda.

Las entradas se pueden adquirir a través de Red UTS, desde 105 mil guaraníes. A partir del 19 de octubre, los precios tendrán un incremento.

Contáctenos: digital@cronica.com.py

Dirección: Av. Zavala Cué entre 2da y 3ra Fernando de la Mora Zona Sur – Paraguay

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